Princesa abre los ojos que este no es tu cuento de hadas, aquí no está tu principe azul, ni el caballero que vaya a salvarte al castillo, ni el chico con el genio de la lámpara, para tí no está ni el ogro que te salvó del dragón. Date cuenta de las cosas y no vayas de princesa cuando realmente eres una de las hermanastras, envidiosa, que venderían hasta a su madre por conseguir un poquitín de fama. Pero como quieras sigue pensando que todo el mundo te desea que cuando la bruja te de la manzana y te desmayes por alli no va a aparecer ni siquiera un principe en forma de sapo. Solo te quiero dar un consejo, date prisa porque la carroza a las 12 se convierte en calabaza y como llegues un poco tarde este chollo se te acabó bonita. Que cuando quieras darte cuenta de la realidad verás que tus amigas de verdad abrán pasado de ti y no tendrás a nadie en quien apoyarte, que tu vestido blanco brillante, se ha convertido en uno lleno de agujeros y que tus queridas hadas madrinas, se habrán convertido en tu peor pesadilla.
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